Durante siglos, han circulado los mitos acerca del monstruo que se dice que vive en las profundidades del lago Ness, en Escocia.
Las observaciones de Nessi, como la llaman afectuosamente, se remontan a 1.500 años atrás. Recientemente algunos observadores han regresado con “evidencia” fotográfica, a pesar de que mucha de ella ha probado ser falsa.