Dos científicos yanquis propusieron una “creativa” solución para seguir adelante con la colonización de Marte: que sea gente mayor voluntaria la que se instale en el planeta rojo tras un viaje sólo de ida.
Los científicos Dirk Schulze-Makuch y Paul Davies, aseguran que “una misión humana a Marte es tecnológicamente factible, pero es muy cara y requiere enormes compromisos financieros y políticos”.