La mayoría, sino es que todos los superhéroes, tienen algún trauma pero eso no importa para quienes los admiran. Pero si los viera un terapeuta ¿qué diría de ellos?
Pues hoy veremos el caso de Peter Parker, mejor conocido como Spiderman. Aparte de superhéroe es un alma atormentada y confundida, llena de remordimientos y culpas, bueno así sería si realmente existiera. El psicólogo diría…
Acomplejado, inundado por la culpa, un individuo con continuos problemas económicos, abatido y con complejo de inferioridad.
Su vida al lado de sus tíos era feliz hasta que su tío muere. Entonces empieza la culpa. Se siente indefenso, un espectador de su propia vida, frustrado por ni siquiera poder declarar su amor a la chica que ama.
Y la personalidad alterna surge cuando se disfraza del hombre araña, entonces es alguien resuelto y libre.
Pero no es todo, Peter Parker también tiene lo que los expertos definirían como locus de control interno, es decir, piensa que los hechos ocurren por sus propias acciones y que son responsabilidad suya.
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