El amor puede trastornar a las personas y llevarlas a realizar lo impensable. Y ya que dicen que en el amor y la guerra todo se vale, mira las historias que ha llevado el amor a un nuevo nivel.
1) Nombrar reina a alguien sin vida
Es el trágico amor del rey Pedro I de Portugal, quien se enamoró de Inés, la dama de compañía de su segunda esposa, y con la cual se casó en secreto. Cuando su padre, Alfonso IV, lo descubrió mandó matar a Inés para frustrar los planes de su hijo de nombrarla reina. Cuando Pedro I se enteró le declaró la guerra a su padre. Aunque se reconciliaron, cuando Alfonso IV murió, Pedro I lo sucedió en el trono, anunció su matrimonio secreto y coronó el cadáver de Inés. Pero la historia no acaba ahí pues el cuerpo fue engalanado con vestimentas reales y sentado en el trono; todos los nobles fueron obligados a prestarle homenaje como reina de Portugal, y tuvieron que besarle la mano en señal de fidelidad y vasallaje.
2) Bajar al infierno
Obviamente no fue literal, pero el poeta italiano Dante Alighieri escribió la ‘Divina Comedia’, dedicada a su amor platónico, Beatrice Portinari. Nunca cruzo palabra con ella pero en su obra fue capaz de atravesar el infierno y el purgatorio buscando a su amada.
3) Romper con el patrocinador
Lo peor del caso es que dejó a su mujer y sus hijos por irse con su querida Mary. Por ello casi se fue a la ruina, su mecenas y editor, filósofo William Goodwin, le retiró el apoyo económico y la sociedad lo criticó sin piedad.
4) Ponerse en peligro de muerte
El amante de la reina Isabel I, Walter Raleigh, se enamoró de una joven de nombre Sarah. Esto llenó de celos a la reina que casi le manda cortar la cabeza, al final, lo encerró en la Torre de Londres y más tarde le perdonó.
5) Escribir unas 700 cartas de amor
El escritor Mark Twain tuvo que escribir una carta diaria por 2 años para conquistar a su espoa Livy. Y es que se enamoró a primera vista de ella pero fue rechazado, luego el prometio escribirle una carta de amor diaria hasta que cambiara de opinión. Y pasaron 2 años antes de recibir el ‘sí’.
6) Abdicar al trono
Ya que su amor no era aceptado a Eduardo VIII de Inglaterra no le importo renunciar, en 1936, al trono para casarse con Wallis Simpson, una divorciada estadounidense. De hecho fue el primer y último en renunciar a la corona en la historia de su país.
7) Construir una escalera con las manos
El amor no respeta edades y es que en 1940, Lui Goujiang , de 19 años, se enamoró de una viuda algo mayor de edad. Resulto que ella también lo quería y se fugaron juntos a vivir en una cueva. Para la comodidad de su amada Lui construyo a mano una escalera de 1.500 escalones para que pudiera salir de la gruta y bajar por la ladera de la montaña.
8) Profanar una tumba
Carl von Cosel, médico alemán residente en Florida, se enamoró de una de sus pacientes, María Helena Milagro-Hoyos. Pero esta murió presa de la tuberculosis. Pero la obsesión del médico fue tal que tras la muerte de María, en 1933, robó el cadáver y vivió con el cuerpo momificado hasta 1940.
¿Conoces alguna otra historia así? Entonces cuéntanosla
