El rey de una nación puede cambiar, para bien o mal, la condición del pueblo. ¿Quién podría ser el mejor rey? Algo difícil de decir.
De lo que si podemos hablar es de los reyes más jóvenes que han existido.
Empezamos con el rey de los francos, Clodoveo II, quien fue coronado para el año 639 cuando tenía sólo 5 años. ¿Te sorprende? Déjame decirte que es el mayor en esta lista.
Bueno pero comparte su lugar con el francés Luis XV, que tenía la misma edad cuando sucedió a su bisabuelo Luis XIV en 1715, según explica Muy Interesante.
Luego le sigue Carlos II el Hechizado, él heredó el trono en 1665 a los 4 años. Su madre Mariana de Austria le ayudó en la regencia hasta que él tuvo 14, pero parece que se quedó acostumbrado a que le ayudarán pues dejó los asuntos de Estado a sus validos.
Por su parte, Isabel II no cumplía los 3 años cuando fue nombrada reina en 1833. ¿Qué podía hacer a esa edad? Obviamente nada, por eso la regencia estuvo 10 años a cargo de otros, primero en manos de su madre María Cristina de Borbón y, luego, del general Espartero.
El primer zar ruso, Iván el Terrible, fue el que más duro en el poder y como no si fue coronado cuando tenía 3 años.
De Rusia demos un salto a Escocia y nos encontramos con María Estuardo que empezó su reinado a los 6 días de nacer.
Pero nadie como el rey español Alfonso XIII, que fue rey desde el día de su nacimiento en mayo de 1886. Su padre, el rey Alfonso XII, murió cuando su esposa María Cristina de Habsburgo-Lorena estaba embarazada.
¿Qué tal esto?
