Generalmente la mamá anuncia la llegada de su bebé con la frase : “Se me rompió la fuente”. Claro a veces quizá esto ocurra ya iniciada la labor de parto. Pero en caso de cesárea las cosas son un poco distintas en algunos casos.
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Como este, el bebé nació dentro de su bolsa amniótica intacta. Un evento “Ultra raro”, mencionó el Obstetra Dr. Aris Tsigris, quien atendió el parto. Él mismo dijo que no había ningún riesgo para el bebé, ya que seguía alimentándose de la placenta y comenzaría a respirar tan pronto como el saco se rompiera.
Dado que no se perforo la bolsa de este bebé el Dr. Tsigris señaló que el bebé no se dio cuenta de que había nacido y se comportaba como si todavía estuviera en el vientre de la madre.
Nacer “en caul” o “nacimiento velado”, como se le conoce a este evento solo ocurre, según se cree, en uno de cada 80.000 nacimientos. En el pasado era un signo de buena suerte y de que el niño estaba destinado a la grandeza. Algunas leyendas sugieren que haber nacido en caul significa que nunca se ahogan.
Otras tradiciones han vinculado el caul con la fertilidad y algunos dicen que protege a una persona de las fuerzas del mal, como brujas y hechiceros, registra Daily Mail.
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