La revista ‘Cáncer’ ha publicado un nuevo estudio que supone que los pacientes con cáncer que están casados tienen una tasa de supervivencia más alta que los que están solo o divorciados, mientras que aquellos que están en proceso de separación tienen un peor pronóstico.
Estudiando los datos de supervivencia a los cinco y 10 años del diagnóstico de cáncer y tras comparar los datos oncológicos con los del estado civil, los científicos observaron que estar en proceso de separación era el estado que peor afectaba a la supervivencia. Estar en proceso de separación es el estado que peor afectaba a la supervivencia del cáncer
Sólo el 45% de pacientes con cáncer separados estaba vivo cinco años después del diagnóstico, y el 37% 10 años más tarde.
“Los pacientes que viven una separación en el momento del diagnóstico pueden ser una población más vulnerable para quienes la intervención médica podría ser priorizada” , asegura Gwen C. Sprehn, de Escuela de Universidad de Indiana de Medicina en Indianapolis (EE UU).
Las personas que viven una separación afrontan cambios e incertidumbres agotadoras, y que pueden comprometer la función de sistema inmunológico en algunos pacientes, añade.
Después de los pacientes casados, los solteros tenían las tasas de supervivencia a largo plazo más altas, seguidas de los que divorciados o viudos.
Las conclusiones apoyan algunos estudios previos que mostraban que las personas casadas tienden a una ayor supervivencia, que podría ser debida al mayor apoyo emocional y más seguridad económina. Para los investigadores, ayudar a pacientes con cáncer a tratar la tensión emocional posiblemente mejoraría su función inmune y las probabilidades de supervivencia.
Fuente: REUTERS
