Sandra es una orangután que nació en Alemania y pasó 25 años en un zoológica de Argentina. En 2015, la jueza Elena Liberatori la declaró “persona no humana” con derechos básicos que incluyen la vida, la libertad y la premisa de no dañarla física o psicológicamente.
Ahora el 5 de noviembre finalmente ha llegado a su nuevo hogar en Florida, en un santuario para simios donde se le ha prometido cuidarla de por vida.
La orangutana ha estado “inquisitiva, tranquila, comprometida e interesada en su nuevo entorno” desde su llegada, dijo Patti Ragan, directora del Centro para los Grandes Simios en una entrevista para CNN.
En un comunicado de prensa dijo lo siguiente:
“Era tímida cuando recién llegó, pero una vez que vio los columpios, los juguetes y las áreas verdes en su nuevo hogar, salió a explorar”.
“Esta es la primera vez en más de una década que Sandra ha tenido la oportunidad de conocer a otros orangutanes, y los encontrará cuando lo desee. Es una nueva libertad para ella, y estamos agradecidos de brindarla ”
Sandra tuvo que viajar a Estados Unidos por que en Argentina no hay santuarios que puedan cuidar de ella. Al ser declarada «persona no humana» tiene el derecho de un hogar, así que el único hogar adecuado para ella en el continente es el Centro para los Grandes Simios, en Florida, donde actualmente hay 22 orangutanes, incluyendo a Sandra y 31 chimpancés, todos ellos rescatados de circos, espectáculos, atracciones itinerantes, laboratorios y el comercio ilegal de mascotas exóticas, según indica el mismo Centro.
«Con esa decisión, quería decirle a la sociedad algo nuevo, que los animales son seres sensibles y que el primer derecho que tienen es nuestra obligación de respetarlos», dijo la jueza a Associated Press.
¿Qué opinas?
[The Guardian, CNN]
